ENTREVISTA A RAFAELA ROMERO EN EL NORTE DE CASTILLA – 20/11/2022
«Los servicios sociales van a tener que ser más integrados y ‘a la carta’»
Rafaela Romero, concejala de Servicios Sociales y Mediación Comunitaria, apuesta por la innovación en esta materia, sobre lo que versará el IV Foro de Servicios Sociales de El Norte de Castilla
El Museo del Patio Herreriano acoge mañana lunes la cuarta edición del Foro de Servicios Sociales que organiza El Norte de Castilla, con el patrocinio de Clece y del Ayuntamiento de Valladolid, que apuesta firmemente por la innovación dentro de los servicios sociales, temática sobre la que versarán las ponencias en esta ocasión. Rafaela Romero, concejala de Servicios Sociales y Mediación Comunitaria, explica la convicción por la aplicación de las nuevas tecnologías en esta materia.
-¿Qué valor le da al asiento de un foro como este?
Es importante, porque creo que tenemos que seguir esta línea de reflexión y de trabajo sobre los problemas sociales y las respuestas que vamos dando. Nuestra experiencia es que se están produciendo cambios muy rápidos, reforzados tras la pandemia, en la atención sobre todo a mayores, perdiendo peso las residencias y cobrando más importancia los cuidados en casa, que aún tienen que cambiar mucho. Estamos en pleno cambio y creo que todavía no sabemos lo que va a ser el futuro, pero este foro nos permite poner ideas y experiencias en común con personas como Enrique Cabero (presidente del CES), que nos va a dar la visión de cómo se trabajan los servicios sociales en Castilla y León, o José Manuel Ramírez, cuya asociación está haciendo un gran esfuerzo por recopilar buenas prácticas, por compartirlas, por extender el conocimiento, por dar visibilidad a los servicios sociales, que siempre parece que son el ‘hermano pobre’ de todas las familias a pesar de que son los que trabajan por la convivencia, y un mundo sin convivencia no tiene mucho sentido.
-En esta ocasión, está destinado a la innovación. ¿Es una obligación?
Es obligatorio porque los cambios sociales cada vez se producen con más rapidez. Nosotros lo vemos muy fácilmente con el perfil de personas mayores. En Fray Luis de León estamos dando charlas sobre física, sobre química, sobre aspectos del conocimiento a los que la gente asiste porque quiere estar activa y conocer. Esas personas, con grandes inquietudes, con mucha autonomía y con capacidad de decisión, requieren de otro tipo de servicios y estos tienen que estar adaptados a que las personas digan cómo quieren ser atendidas. Estos servicios siempre han sido muy rígidos y tiene que haber otra manera de atenderlas porque los usuarios así lo quieren; quieren elegir cómo envejecer y cómo ser atendidos, por eso hay que transformar lo que tenemos, empezando por las residencias de mayores, los centros de mayores y centros de día, la ayuda a domicilio… Y las nuevas tecnologías nos van a ayudar mucho en estos cambios.
-¿Cómo diría que ha influido la pandemia respecto a la digitalización de los servicios sociales?
Ha sido un empujón muy fuerte. Nosotros teníamos aulas de informática en los centros de mayores y cuando llegó la pandemia nos planteamos llegar a las personas a través de tablets, de teléfonos, del ordenador… Nos preguntamos si la gente estaba preparada para eso, y la respuesta fue instantánea: llevamos 20 años dando clases para que la gente sepa usar estas herramientas y las personas de a partir de 60 años ya ha utilizado en su trabajo el ordenador. A veces tenemos en la cabeza más dificultades de las que hay en realidad: los mayores usan la tecnología y la usan bien.
-¿Qué políticas está desarrollando el Ayuntamiento de Valladolid en esta materia?
En estos momentos estamos poniendo en marcha tres proyectos europeos para estas cuestiones. En uno de ellos, los ciudadanos pueden ver la trazabilidad de las solicitudes que hacen desde casa, sin tener que ir a la asistenta social, con lo que buscamos una mayor transparencia. Estamos preparando también los centros de mayores para poder retransmitir las actividades que hagamos y que las personas en su casa las puedan hacer. Con Clece, de manera experimental, estamos instalando dispositivos ‘alexa’ con pantalla, lo que permite hacer una atención personal durante unas horas y telemática el resto del día y con los que facilitamos al usuario diferentes actividades de memoria o puede comunicarse y verle la cara, sin ir más lejos, a las personas que les estaban atendiendo, de las que a veces solo conocían la voz. Esto combina tecnología con humanidad y es un paso adelante que seguro que va a abrir mucho más camino en poco tiempo, porque con los cambios vamos muy rápido. A veces pensamos que la tecnología deshumaniza y no tiene por qué ser así.
-¿Hacia qué modelo cree que avanzamos y cómo esperan acompasar sus pasos desde el Consistorio?
Hasta ahora tenemos contratos diferenciados de teleasistencia, ayuda a domicilio, centros de día… pero yo creo que esto va a sufrir un cambio en los próximos años y que vamos a tener que tener servicios mucho más integrados, no con cuatro o cinco personas referentes, sino un solo servicio más ‘a la carta’, adaptado a las necesidades y a elección de cada persona. Las nuevas tecnologías también nos van a permitir muchas cosas. Todo esto va a cambiar, lo va a hacer de manera muy rápida y nos va a permitir combatir la soledad de otra manera, pero siempre en comunicación con la persona.